Por Diaz Francisco
La Liga de España compite cada vez menos en términos económicos con otras ligas. Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid sostienen un campeonato que no atrapa público y tampoco genera ingresos para un crecimiento verdadero desde la infraestructura y desde el ofrecimiento de un espectáculo de calidad semana a semana.
La Premier League es el notorio contraste. La Primera División de Inglaterra es, desde hace mucho, considerada la mejor liga del mundo y se podría decir que es una Superliga sin llevar ese nombre. La última muestra de su poderío se dio con el fichaje de Unai Emery como director técnico de Aston Villa a través del pago de su cláusula de rescisión de 6 millones de euros.
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Este movimiento debe ser un llamado de atención a Javier Tebas. Y es que Emery prefirió marcharse al 15° clasificado de la Premier en vez de permanecer en Villarreal, un equipo al que sacó campeón de Europa League y con el que viene de alcanzar las semifinales en la última Champions League. Algo parecido sucedió con los fichajes de Newcastle, que se encontraba peleando el descenso, en la última ventana. Esto deja en evidencia que la creación de la Superliga que impulsa Florentino Pérez es necesaria.
El último libro de pases veraniego tuvo como gran protagonista a la Premier League. Los clubes de la Primera División de Inglaterra gastaron en conjunto la monstruosa cifra de 2.200 millones de euros. Esto fue el triple de lo invertido por la Serie A (segunda en el ránking con 749.2 millones) y más del cuádruple de los 505,7 millones que gastaron los equipos de La Liga.
13/12/2024
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