Brillo en Real Madrid, dejó 40 millones y ahora jugará con Musiala

En los últimos tiempos, el Real Madrid ha experimentado la transición de grandes estrellas, abriendo paso a una nueva generación liderada por jóvenes talentos como Vinicius, Camavinga, Tchouaméni, Valverde, Rodrygo y Militão. Sin embargo, entre las salidas notables, la venta de Raphael Varane en 2021 destaca como una operación exitosa desde el punto de vista financiero.

El zaguero francés, adquirido por el Real Madrid en 2011 por 11 millones de euros proveniente del Lens, fue transferido al Manchester United por 40 millones de euros. Esta transacción resultó beneficiosa para los merengues, ya que no solo generó un significativo retorno de inversión, sino que también evitó una salida gratuita como en el caso de Benzema y Ramos.

Varane, en su segundo año con el Manchester United, ha perdido su condición de titular en la defensa central. El Bayern Múnich, buscando reforzarse, considera la posibilidad de adquirir al francés, no solo por su calidad futbolística sino también por la oportunidad de negociar un traspaso en el próximo mercado de invierno.

La situación se complica para el Manchester United, ya que el alto salario de Varane, aproximadamente 20 millones de euros anuales, se vuelve una carga financiera no deseada. La directiva del club inglés busca optimizar sus recursos y realizar un mercado de verano sólido para competir en la Premier League y torneos europeos.

Éxito financiero para el Real Madrid 

En retrospectiva, la venta de Varane no solo ha representado un éxito financiero para el Real Madrid, sino que también ha destacado por su capacidad para realizar transacciones estratégicas, maximizando el valor de los activos del club en el mercado de fichajes. El futuro de Varane parece nuevamente en movimiento, y su destino podría estar vinculado al interés del Bayern Múnich y a las decisiones del próximo mercado de invierno.