Por Diaz Francisco
Cuando el balón comenzó a rodar en el Camp Nou, el Real Madrid ya había concretado su goleada ante el Almería, quedando a ocho puntos de diferencia con respecto al Barcelona en Liga. El Betis, que estaba cuajando una gran temporada, representaba algún tipo de esperanza para el pueblo madridista, que confiaba en que podían llegar a sacar un resultado favorable.
Pero Carlos Del Cerro Grande no lo permitió, limitando al conjunto bético desde el arranque. Tras la lesión de Luiz Felipe, Manuel Pellegrini se vio obligado a mandar a la cancha a Edgar González en su reemplazo. El central del Betis fue recibido con una amarilla por parte del colegiado, que cayó en el juego de Raphinha y su actuación de que había sido derribado.
González no había llegado a entrar en calor que Del Cerro Grande lo mandó a las duchas nueve minutos después de haberlo amonestado. El árbitro consideró que el defensa pisó intencionalmente a Pedri y decidió expulsarlo. Doble amarilla y la balanza ya estaba del lado culé.
El Betis afrontó más de 60 minutos con un hombre menos y le costó caro: 4-0 para que el Barça vuelva a recuperar la ventaja de 11 puntos. Cuando el Madrid está al acecho, los árbitros hacen lo propio y le vuelven a servir en bandeja La Liga al equipo de Xavi Hernández. Con el ‘Caso Negreira’ más latente que nunca, el título comienza a oxidarse cada vez más.
09/11/2024
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