Lo sancionaron y volvió más hambriento que nunca, Osasuna ya padece a Vinicius

Hubo conexión brasileña en La Cartuja. Vinicius desbordó por la banda y centró al área para que Rodrygo remate de primera al fondo de la red en tan solo dos minutos de partido. Toda la estrategia que había planteado Osasuna para frenar a Vini se echó a perder apenas iniciada la final de la Copa del Rey.

Jagoba Arrasate le había advertido a sus jugadores en la previa la peligrosidad de Vinicius en el uno contra uno, pero poco pudieron hacer. El extremo carioca, que venía de cumplir una fecha de sanción por acumulación de tarjetas frente a la Real Sociedad, le rompió la cadera a Jon Moncayola y el resto fue historia.

Zasca del Madrid en Sevilla, para dejarle por sentado al Osasuna quién manda sobre el terreno de juego. Vinicius ya causa estragos y revolucionó el partido. Sus desbordes resultan imposibles de parar y Moncayola ya quedó en ridículo delante de todos.

Ni 10 minutos sin pegarle

Como era de esperar, Vini ya empieza a recibir por todos lados. Golpes, patadas e insultos que, de momento, Sánchez Martínez pasa por alto. El jugador del Madrid ya se le fue al humo en alguna que otra oportunidad y la rigidez comienza a subir de nivel.